sábado, 24 de septiembre de 2011

El Real Madrid pone punto y final a su crisis endosándole un 6-2 al Rayo

El Rayo Vallecano visitaba ocho años después el Santiago Bernabéu y Sandoval ya avisó que saldría a jugar al Real Madrid con un planteamiento ofensivo. Ese planteamiento se reflejaría en los primeros minutos de encuentro cuando Michu logró adelantar a los vallecanos en el primer minuto de juego. Lass cede mal a la defensa y Michu bate a Casillas tras rechazar mal el balón tras un disparo de Tamudo. La sombra de la crisis acechaba sobre el Bernabéu, ya que el Rayo Vallecano se acercaba a la portería de Casillas y dominaba la posesión del balón. Ese dominio vallecano duró hasta que entró al campo el mejor jugador del equipo madridista: Özil. Entró sustituyendo a Lass a los 27 minutos del comienzo del partido y revolucionó el partido para el Real Madrid. El dominio del Real Madrid era palpable ya que conseguían acercarse a la portería de Dani con mucha más facilidad y movían la pelota con fluidez. El gol del Real Madrid llegó en uno de esos contragolpes tan característicos del Real Madrid. Tras un mal saque de banda de Tito, Cristiano Ronaldo corrió toda la banda izquierda y soltó un zurdazo que se coló entre las piernas de un Dani que pudo hacer mucho más. El partido se convirtió en un monólogo madridista, aunque no por ello el Rayo dejó de seguir intentando hacer su fútbol tratando bien el balón, aunque no lo tuvo fácil ante la asfixiante presión del equipo de Mourinho. El segundo gol tendría como protagonista a Higuaín al final del primer tiempo. El argentino logró el gol tras empujar un balón que Sergio Ramos, en posición dudosa, le colocó a placer en una jugada de estrategia botada por Xabi Alonso. Con ese gol acabaría un primer tiempo que tuvo color franjirrojo los primeros veinticinco minutos y por madridistas durante los últimos veinte minutos. Especial mención al rayista Lass, al que se le vio muy enchufado. El joven de tan solo 19 años jugó con un descaro impropio de un jugador de su edad y en un estadio tan grande como el Bernabéu. En más de una ocasión volvió loco a la defensa madridista.

El segundo tiempo comenzó con un Real Madrid muy ofensivo buscando sentenciar el encuentro. Esa aparente sentencia llegaría tras un derribo claro dentro del área de Movilla sobre Kaka'. Ronaldo se encargó de lanzar el penalti fuera del alcance de Dani. Ese 3-1 y el dominio del Madrid parecía firmar la sentencia al partido, pero Di María vería su segunda tarjeta amarilla tras una mano y acto seguido el conjunto rayista metería el 3-2 de mano de Michu. El rayismo volvió a creer en la remontada, ya que el equipo volvía a tener largas posesiones mientras que el Real Madrid buscaba robar para salir con transiciones rápidas hacia la portería de Dani. Así fue como el Real Madrid mató la ilusión rayista. Tras una jugada del Real Madrid, Alonso volvió a colgar un balón, esta vez en un saque de esquina, que Varane remató al fondo de las mallas de espuela. El central demostró descaro y madurez para jugar ahí, aunque todavía se le ve algo verde debido a su juventud. El 4-2 dominaba el marcador y se intuía que la goleada podía ser mayor. El quinto gol lo metería Benzema, que entró al campo sustituyendo a Higuaín. El francés se sacó un potente disparo raso al palo largo totalmente fuera del alcance de Dani desde fuera del área. El sexto gol llegó en la recta final de penalti de Dani sobre Cristiano Ronaldo. El portugués se encargó de lanzar el penalti para poner el definitivo 6-2 en el marcador.

El Rayo hizo un gran partido en el Bernabéu, con un planteamiento muy valiente de Sandoval que salió a jugar al Real Madrid de tú a tú. El resultado final fue demasiado amplio para lo visto sobre el terreno de juego, ya que el Rayo Vallecano tuvo ocasiones para meter algún gol más. El Real Madrid necesitó tan solo ocho disparos para meter seis goles, por lo que podemos valorar el gran trabajo defensivo de los vallecanos y la gran eficacia del conjunto blanco. Mourinho estuvo muy bien en los cambios, quitando a Lass, que interrumpía el juego madridista, para dar entrada a Özil.  Tras la expulsión de Di María el Real Madrid entregó la pelota al Rayo para salir al contraataque. En definitiva, el Rayo ha encajado una gran goleada pero ha ganado respeto y prestigio frente a sus rivales jugando a un equipo cuya estrella cobra más dinero que toda la plantilla rayista. Solo con ese dato vemos la gran diferencia de potencial que existe entre ambos equipos.

jueves, 22 de septiembre de 2011

El Rayo Vallecano sufre su primera derrota liguera ante un crecido Levante

Tras la victoria del Rayo Vallecano el pasado fin de semana ante el Getafe, el conjunto de Sandoval recibió anoche a un Levante que venía de derrotar en el Ciudad de Valencia al todopoderoso Real Madrid cuya intención era la de prolongar su racha una jornada más. Finalmente, el conjunto valenciano consiguió su objetivo de llevarse los tres puntos, provocando que el Rayo Vallecano sufriera su primera derrota (1-2) de la temporada 2011-2012.

El técnico del conjunto local, José Ramón Sandoval, introdujo varios cambios en el once inicial para evitar lesiones por la gran acumulación de partidos que supone jugar tres partidos en una semana. Por ello, el Rayito salió al campo con Raúl Bravo, Labaka, Trashorras y Delibasic como caras nuevas en el once inicial sustituyendo a Casado, Movilla, Tamudo y al tocado Arribas. El Rayo salió con ansias de robarle el balón al Levante y lo consiguió, aunque sin mucha frescura de ideas. Delibasic gozó de la primera ocasión clara del partido al poder rematar fácilmente un centro al que no llegó inexplicablemente. Tras esa acción y sin apenas haber dado señales de vida, el Levante encontró el punto débil del Rayo en la noche de ayer: el lateral de Raúl Bravo. Desde ahí llegarían las jugadas más claras del primer tiempo y desde ahí llegó el gol granota: centro de Koné al primer palo donde esperaba Valdo para introducir el esférico en la portería defendida por Dani Jiménez. El estadio se quedó en silencio ante la inexplicable situación. El Rayo sufrió el golpe y siguió intentándolo, aunque sin la fluidez en el centro del campo que Movilla le otorga al conjunto franjirrojo. Así, sin explicación alguna y sin apenas perturbar a Dani, el Levante botaría un saque de esquina que remató Ballesteros pese al gran marcaje que Jordi le hacía. Sinceramente, debe ser complicado defender en un córner a un tipo con semejante envergadura. El 0-2 sentó como un jarro de agua fría al conjunto local, que no se creía lo que estaba ocurriendo. El Rayo seguía dominando la posesión del balón pero apenas conseguía profundizar a través de la defensa del Levante, dispuesta a defender ese resultado como fuese. De hecho, Michu se quejó de un manotazo y Juanlu algo muy bonito no le tuvo que decir a Delibasic para que éste le empujara, creando una tangana que se resolvería con tarjeta para el delantero serbio. No quito méritos a un rocoso Levante que defendió muy bien, con unas líneas muy juntas, pero creo que no son formas de intentar ganar a un equipo nada sucio que tan solo trata de jugar al fútbol. El primer tiempo acabó y todo el estadio aplaudió en el  descanso al mesías Movilla, que salió a calentar, esperándo que con el mediocentro en el campo las cosas cambiaran.

Sandoval tiró de valentía e introdujo dos cambios: quitó a un deficiente Raúl Bravo para dar paso a Pacheco y dio entrada a Movilla, quitando a Labaka. El planteamiento de Sandoval fue totalmente ofensivo, sacando tan sólo tres hombres atrás: Jordi, Tito y Botelho. El segundo tiempo fue un quiero y no puedo vallecano, que veía que pese a tener al Levante encerrado en tres cuartas partes del campo y gozar de un altísimo porcentaje de posesión apenas generaban ocasiones de gol. Sandoval trató de cambiar esa poca profundidad y acierto sacando a Tamudo en sustitución de un Trashorras que no apareció y que no jugó con la intensidad que el partido exigió. Tamudo logró que el Rayo jugara más profundo, cayendo constantemente a banda mientras Delibasic fijaba a los centrales. Tuvo la mejor jugada del partido en sus botas, recortando a dos defensas desde la línea de fondo y lanzando un algo flojo disparo que buscaba el segundo palo, pero Munúa se interpuso esta vez entre Tamudo y el gol. Casi lo vuelve a conseguir en el gol rayista, ya que detuvo el penalti que sufrió y lanzó Tamudo, pero esta vez el rechace le cayó al "9" vallecano que la empujó dentro de la portería a placer. El estadio rugió más que nunca tratando de llevar en volandas a su equipo hacia la remontada. Con el 1-2 en el marcador y el Rayo echado al ataque, el árbitro entró en escena al expulsar con roja directa a Botelho por una supuesta agresión a Ballesteros. Como Botelho, yo tampoco entiendo como un jugador como el brasileño puede lograr tumbar a un jugador de 1,88 de altura y casi 100 kg de peso con semejante virulencia. El Rayo con 10 siguió al ataque ante la rocosa defensa levantina hasta el último minuto sin lograr alterar el resultado. 

Finalmente, los tres puntos viajan a Valencia y dejan a un Rayo Vallecano con 5  puntos de 12 posibles con el pensamiento de que igual merecieron alguno más durante estas cuatro jornadas pasadas.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Los gladiadores vallecanos salen victoriosos en el Coliseum por la mínima

El Rayo Vallecano, al que muchos daban por descendido antes de comenzar esta temporada 2011-2012, logra su primera victoria en casa del Getafe. El estadio congregó alrededor de 500 aficionados rayistas que no perdieron la ocasión de ver el primer derbi madrileño entre estos dos equipos en la máxima categoría. 

Desde el primer minuto el equipo franjirrojo salió a por la victoria ante un Getafe compuesto por su once de gala. Poco tardó Michu en meter el primer y único gol del equipo vallecano. En el minuto 4 de encuentro, tras un saque de esquina, Bothelo peinó el balón en el primer palo para que Michu se anticipara a la defensa azulona y adelantara al Rayo en el marcador. El Getafe trataba de jugar pero un Rayo dirigido desde el centro del campo por un excelente Movilla robaba balones y trataba de atacar constantemente. Se comenzó a ver que el Getafe tenía a sus mejores hombres sobre el césped pero que a estos aún les faltaba fuelle para despuntar, ya que jugadores como Guiza o Pedro León apenas participaban en el escaso juego del Getafe. El Rayo continuaba dominando el balón y acercándose a la portería defendida por Moyá. Piti tuvo una clara ocasión para poner el 0-2 en el marcador tras un pase al hueco de Movilla, pero la vaselina se marchó rozando el larguero. Para explicar el dominio del Rayo un dato: el primer remate del Getafe fue en el minuto 42. La defensa del Rayo Vallecano ha rozado la perfección, destacando a Casado, cuyas incorporaciones en ataque han sido importantes y su contribución en defensa ha sido simplemente magistral, defendiendo a un Pedro León al que le falta muchos partidos de rodaje tras su agónico año en el Real Madrid.

La segunda parte comenzó más igualada, con un Getafe con más dominio de la pelota y que tenía más ideas aunque sin lograr crear grandes ocasiones de peligro. Para ser sinceros, la segunda parte se puede describir como un auténtico aburrimiento, ya que el Rayo estaba muy bien plantado en el campo demostrando que pese a ser un recién ascendido tiene muy claro el camino a seguir y que el Getafe no sabía muy bien como trazar jugadas que pusieran en problemas al Rayo. Lo único que le dio emoción fueron los últimos minutos donde se vió a un Getafe que quería pero no podía, lanzando saques de esquina que no acabaron en gol.

Los vallecanos siguen invictos con dos empates y una victoria, mientras que el Getafe tan solo suma un punto de nueve posibles.